Día Mundial del Reciclaje: Guía práctica para reciclar con niños

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) decidió en 2005 dedicar el 17 de mayo al reciclaje, con el objetivo de promover hábitos de reciclaje y reducción del consumo de recursos entre la ciudadanía. En Andreu estamos comprometidos con la protección del Medio Ambiente, por eso, en el Día Mundial del Reciclaje te hemos preparado una Guía práctica para reciclar con niños, ya que su implicación desde pequeños es clave en el cuidado de nuestro planeta. Además, te animamos a compartir con nosotros los trucos de reciclaje que utilicéis en casa. ¡Juntos por un planeta mejor!

Empecemos con una buena noticia porque ¿sabes que el reciclaje lleva cinco años consecutivos creciendo en Cataluña? Según los datos de la Conselleria de Territori i Sostenibilitat, así es. En el año 2019, los catalanes reciclamos hasta el 44,8% de nuestros residuos, un 9% más que en 2018. Un dato para estar contentos ¿verdad? En total, en 2019 se reciclaron en Cataluña 1,8 millones de toneladas de basura. Si no te parece una cifra muy espectacular, te damos un dato: es la cifra más alta de nuestra historia.

Aunque reciclamos todo tipo de residuos, los que más estamos reciclando en los últimos dos años es papel y cartón, con una subida del 29%. También reciclamos un 7% más de vidrio y un 5% más de envases ligeros, así como un 6% más de basura orgánica.

Comprometer a los más pequeños de la casa con el reciclaje y los principios de la economía circular – ya sabes: Reducir, Reutilizar, Reciclar como modo de vida – es fundamental para que sean adultos responsables con el medio ambiente y con su entorno, por eso en el Día Mundial del Reciclaje queremos centrar el foco en los más pequeños y te hemos preparado una guía práctica para reciclar con niños. Te damos consejos, te sugerimos pautas para reciclar en casa y te proponemos actividades divertidas para que aprendan a reciclar jugando, que a ti también te gustarán. ¡Cuidemos juntos del planeta!

¿Por dónde empezamos?

Paso 1: Explica a tus hijos en qué consiste reciclar y para qué sirve

Como te decíamos más arriba, comprometer a los más pequeños con el reciclaje y enseñarles a alargar la vida útil de las cosas desde muy temprano es la base para que interioricen la importancia de cuidar del planeta. Empieza por explicar a los más pequeños de la casa qué es reciclar, para qué sirve y por qué lo hacéis en casa.

Paso 2: Convierte reciclar en un juego

Para ello instala, en la medida de lo posible, cubos o bolsas para separar los residuos en casa, de modo que puedan ir practicando. Y, cada vez que tires algo a la basura o que ellos lo hagan, recuérdales cómo ayuda al medio ambiente un gesto tan sencillo como separar los desechos. Conforme vayan adquiriendo soltura puedes convertirlo en un juego y preguntarles a ellos dónde va cada residuo y por qué.

Paso 3: Da ejemplo

La mejor manera de enseñar a los niños las tareas que deben hacer es empezar por hacerlas nosotros mismos. Juega también tú al juego del reciclaje: si ellos te ven reciclar, aprenderán de ti. Además de separar los residuos, puedes enseñarles otros gestos sencillos como cerrar los grifos de agua cuando no se está usando (al lavarse los dientes, las manos, en la ducha, al fregar…), apagar las luces cuando haya suficiente luz natural o no abusar de la calefacción o el aire acondicionado en casa.

5 estrategias para que los niños aprendan a reciclar

Cuelga en la nevera un Arcoiris o una Flor del Reciclaje

Fíjate en cuántos tipos de contenedores para residuos hay en vuestra localidad y cuáles son los colores. Dibujad un arco iris o una flor, con tantas barras de color o pétalos como contenedores de residuos haya en vuestra localidad. Pintad cada uno de ellos con el color de un contenedor y escribir el tipo de residuo asociado a cada color. De este modo tan visual, los niños aprenderán a identificarlos correctamente y podrán reciclar de manera autónoma.

Sustituye las bolsas de plástico por bolsas ecológicas

De tela, compostables, reutilizables… En el mercado existen cada vez más alternativas a las bolsas de plástico, de manera que te resultará sencillo enseñar a los niños a llevar sus cosas en contenedores alternativos al plástico. Desde una mochila a una cesta, pasando por todo tipo de bolsas de féculas compostables, la próxima vez que salgáis de compras, de picnic, de excursión o hagáis cualquier actividad para la que se requiera una bolsa, utilizad alternativas al plástico.

Crea cajas de reciclaje

Plantea una actividad sencilla con los niños, que les hará sentirse útiles y además ayudará en el reciclaje de los componentes pequeños de los envases y objetos (tapones, anillas, pilas…), que son precisamente y según diversos estudios los elementos más complicados de reciclar, por su tamaño. Con cajas de zapatos o similares, ayúdales a crear cajas de reciclaje, cada una de ellas dedicada a un tipo de residuo pequeño concreto: pilas, bombillas, tapones de plástico, chapas de botella, anillas… Podéis hacer tantas como queráis. Decorad cada caja con motivos que identifiquen el residuo que va en ella y acostumbra a los niños a recolectar en casa estos desechos e ir llenando las cajas para llevarlas después a los contenedores correspondientes.

Da una segunda vida a los residuos

¿Instrumentos con envases de yogur? ¿Lámparas con tarros de conservas? ¿Caretas y disfraces con cajas de cartón? Reutilizar los envases es una manera estupenda de enseñar a los niños reciclaje al tiempo que estimulas su creatividad. Guardad rollos de cartón del papel higiénico y de cocina, papel y cartón usados, envases de yogur, tarros… Y aprovechad los fines de semana para hacer manualidades con materiales reciclados. Seguro que se os ocurren un montón de ideas. Nos encantará verlas, así que podéis etiquetarnos en instagram para que veamos vuestras creaciones.

Reaprovecha la ropa y los juguetes usados

Anima a tus hijos para que revisen sus juguetes y su ropa cada cierto tiempo y donen a iniciativas sociales aquellas prendas o juguetes que, estando en buen estado, ya no utilizan o no les sirven. Concienciar a los niños de la realidad social de su entorno y de que con gestos como éste pueden ayudar a personas menos favorecidas que ellos es educarles en la empatía y el compromiso social, así como contribuye a la economía circular, al dar una segunda vida a las cosas.

Tres juegos para enseñar economía verde a los niños

En busca de los envases reciclables

Para desarrollar este juego, que consiste en enseñar a los niños a detectar qué envases de plástico son reciclables y a retarles a que busquen productos con envases reciclables para aquellos que no lo son, necesitamos un poco de trabajo previo en casa. En su etiquetado, los envases de plástico cuentan con un código del 1 al 7 que indica su grado de reciclabilidad. El 1 es el más reciclable y el 7, el menos. Aprendido esto, el juego consiste en ir comprobando, al hacer la compra, cómo de reciclable es cada envase que metemos en el carro y qué alternativas tenemos para los envases más difíciles de reciclar. También podemos retar a los niños a encontrar productos en envases de vidrio, metal o cartón, alternativos al mismo producto en plástico.

Guardianes de la energía

Seguramente sabes que hay dispositivos presentes en nuestro hogar que continúan consumiendo energía una vez apagados o en reposo. Es el caso de televisores, ordenadores, microondas, cafeteras, descodificadores de televisión, cargadores varios… Este juego consiste en enseñar a los más pequeños a ahorrar energía vigilando que no se queden encendidos o enchufados aquellos aparatos o luces de la casa que no necesitemos utilizar en un momento dado. Podéis hacer un cuadrante en la nevera y apuntar qué cosas os habéis dejado encendidas o enchufadas sin necesidad. Al final de la semana o una vez al mes podéis revisarlo y ver vuestros avances en ahorro de energía.

Protectores del agua

Igual que sucede con la electricidad, el gasto de agua en el hogar es a veces más elevado de la cuenta porque dejamos los grifos abiertos sin darnos cuenta mientras nos lavamos los dientes, nos enjabonamos las manos o el pelo en la ducha o mientras fregamos los cacharros. Los protectores del agua tienen como misión dibujar carteles con mensajes que animen a cerrar el grifo cuando no sea necesario mantenerlo abierto y colgarlos en las zonas críticas de la casa: el lavabo, el fregadero, la ducha…

Esperamos que estos consejos y actividades te resulten útiles y que los pongáis en práctica en casa. En Andreu Gastronomia también estamos comprometidos con la conservación de nuestro entorno. En este blog puedes encontrar periódicamente información y consejos para mejorar entre todos el cuidado del planeta.

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